Ana: Está en el Cielo, adonde tú nunca irás.
Gloucester: Que él me dé gracias, puesto que le ayudé a llegar allá; porque él servía más para ese sitio que para la tierra.
Ana: Y tú no sirves para otro sitio sino para el infierno.
Gloucester: Sí, para otro sitio, si me dejas nombrarlo.
Ana: Algún calabozo.
Gloucester: Tu alcoba.
[Richard III - W. Shakespeare]