viernes, 24 de febrero de 2012

24.2

"-Querido Ralph-musitó-, no debes quererme.
-No puedo evitarlo
-Algún día, cuando te cases, ¿me escribirás?
-Es contigo con quien quiero casarme
-Me olvidarás. Olvidarás este verano. Irá desvaneciéndose hasta convertirse en sombras, y las voces serán murmullos que no podrás oir. El ahora, este presente en el que tú y yo estamos aquí sentados, es una realidad que no perdurará y que no tiene por qué hacerlo. No verás esta habitación con más claridad que con la que to veo los rostros que describen las novelas. Soñarás con Lahardane, Ralph, de cuando en cuando, o quizás no lo hagas nunca. Pero si lo haces, yo seré un fantasma entonces.
-Lucy...
-Oh, yo si que soñaré contigo, con todas las veces que has venido hasta aquí, con estos días que transcurren ahora, con este instante en que hemos jugado a la bagatela hasta aburrirnos, y conmigo misma, o diciéndote al momento siguiente: "¿Y si jugamos al veintiuno?"
-Por qué dices que no debo quererte?
-Porque quererme te hará desgraciado.
-Pero no es así. Me hace feliz.
-¿Jugamos al veintiuno? Va a seguir lloviendo."

[La historia de Lucy Gault - William Trevor]

No hay comentarios:

Publicar un comentario